Acerca de su matrimonio:
“Él entra a la habitación, y me ilumina. No puedo evitarlo. Unos días en [el rodaje de ‘Les Misérables’] me dijo ‘me estoy divirtiendo mucho. Sólo quiero actuar contigo y tengo que estar muy triste ahora mismo’. Yo sabía desde el momento en que lo conocí que era el amor de mi vida”.
Sobre su sex-appeal:
“No soy Rihanna. No soy cool. Cuando la gente viene a mí en la calle, a menudo quieren un abrazo, no una foto, y lo quieren porque les gusta mi trabajo. Durante mucho tiempo fue yo y ella [su manager] contra el mundo. Fui vista como una niña buena de historieta en este extraño mundo con la que de ninguna manera me identificaba, muy dulce, muy accesible y nada interesante. No tenía agallas, no soy deseable”.
Acerca de cumplir 30 años de edad:
“No ayuda que el nuevo grupo de chicas sean tan hermosas y de 22 años. Pero estoy emocionada por ello”.
